domingo, 7 de noviembre de 2010

BODAS DE PLATA AL AIRE


*ISAAC VILLAMIZAR
Llegar a 25 años haciendo un programa de radio se dice fácil. Cuántas experiencias, anécdotas y satisfacciones se acumulan en tan larga trayectoria. Sólo para medir este recorrido, se puede pensar en el adelanto vertiginoso que en dos décadas y media han tenido los medios de comunicación e información. En 1985, cuando comenzamos a transmitir nuestro programa radial “Balanza Jurídica”, no imaginábamos que algún día, por medio de una red llamada Internet, nuestra voz y nuestro mensaje podrían ser escuchados en vivo en cualquier parte del mundo.

Tampoco imaginaba yo, aquel 1 de noviembre de 1985, cuando tímidamente, sin saber nada de radio comencé con esta labor de difusión y orientación legal, la utilidad tan grande que nuestro espacio podía prestar a la comunidad. No lo llegamos a dimensionar, con la magnitud que ahora, con propiedad, podemos hacerlo.

Yo me siento muy satisfecho de hacer Radio con el Derecho. En mi condición de Abogado, también con 25 años de ejercicio, he sentido cómo orientando a la ciudadanía en el conocimiento de sus derechos y deberes, en la comprensión de los alcances de la ley, en la respuestas a las consultas de los oyentes, en el análisis de temas jurídicos de interés general, se puede hacer labor social y bien común, con la justicia como norte.

Como Locutor he llegado a amar este proceso de comunicación pública, a interiorizarla de tal manera que ya forma parte de nuestra sangre, de nuestros genes, de nuestras entrañas. Hablarle a la audiencia, sentirla tan nuestra, tan cerca del micrófono, de los estudios de transmisión, vinculada con ella todos los domingos, en un recorrido hertziano desde la voz de quien transmite, al oído de quien escucha, penetrar la intimidad de su hogar, de su vehículo, de su oficina, de su radio de bolsillo o de sus cornetas del computador, me hace reflexionar que nuestro pensamiento, mensaje e ideas tienen un poder extraordinario, no sólo para informar, orientar y comentar a través de este medio, sino también para influir en la conducta y opinión de la gente. ¡Qué maravilla es la Radio!

Yo me siento muy orgulloso de arribar a estas Bodas de Plata con "Balanza Jurídica", único programa radial de corte legal que se ha mantenido por tan largo tiempo en la radio tachirense. A la vez estoy profundamente agradecido con todas aquellas personas que me han acompañado en este recorrido del aire radiofónico. A mis consecuentes oyentes - algunos de ellos que llevan 25 años sintonizando el espacio - mi gratitud eterna. A los Directores de las Emisoras donde se ha radiado el espacio, en especial a la Lic. Desirée González Zerpa, Directora de Ecos del Torbes, mi casa que tanto quiero, y persona que le tiene gran cariño a "Balanza Jurídica", mi aprecio de siempre. A los Coordinadores de Programación, que han sido tan especiales en el apoyo de la transmisión del programa, mi reconocimiento sincero. A los operadores que desde la consola del sonido me han asistido técnicamente, mi abrazo de agradecimiento particular. Dios y la Virgencita Rosa Mística me regalen salud para seguir con esta excelente labor. Yo seguiré asumiendo el compromiso con la audiencia, que es a quien en definitiva me debo como Abogado y Comunicador..."Estamos al Aire"

*Abogado y Locutor.
 

lunes, 4 de octubre de 2010

Quedó inhabilitado


Isaac Villamizar

Los Diputados electos de la oposición representan la voz de la mayoría. Resulta imprescindible que mantengan una actitud unísona, en bloque y coherente con la realidad del país. Todos ellos en grupo deben adoptar las estrategias a seguir ante la avalancha legislativa ya anunciada. Los actuales diputados pretenden aprobar de manera aplastante, sin consulta de ninguna naturaleza, la Ley de Comunas, la Ley del Trabajo y otras leyes comunistas, en flagrante vulneración de la Constitución.
Me permito instruir a los Diputados electos del Táchira sobre algunas consideraciones jurídicas ante el anuncio de una inmediata Ley Habilitante para Chávez. Señalemos primero que el Artículo 203 constitucional contempla un absurdo jurídico, al referirse a delegación de materias. Lo que se delega son competencias, funciones, potestades o atribuciones en determinadas materias. Veamos los supuestos que harían ahora inválida una ley habilitante.
En primer lugar, si bien es cierto que no hay limitación constitucional sobre las materias que pueden ser reguladas, y tampoco es necesaria una crisis, emergencia o requerimiento de interés público, una ley habilitante exige un objeto definido y concreto. No podría ser una ley habilitante de plenos poderes, ni tampoco sobre materias cuya regulación constitucional es inexistente. La transferencia legislativa y los decretos leyes no podrían referirse a socialismo, comunismo, limitaciones o desconocimiento de derechos expresamente regulados por la Carta Magna. Tampoco podrían alterar la estructura política territorial del país, ya establecida en la Constitución. El Presidente de la República estaría impedido de dictar decretos con fuerza de ley que no estén fundados en las normas constitucionales vigentes. Lo contario sería un fraude constitucional. En segundo lugar, la delegación por ley habilitante requiere de directrices, propósitos y marco de delegación. Mediante ellas el legislador establece en la ley habilitante límites a la potestad normativa del Presidente. Para cada ámbito material deben enunciarse reglas generales a ser desarrolladas por el gobierno en los decretos legislativos, así como los fines que pretenden lograrse con ellos. En 11 años ha quedado evidenciado que el Presidente, por vía ordinaria, no ha podido solucionar los graves problemas del país. Si ha sido incapaz de ello con sus propias atribuciones, y con precedentes leyes habilitantes, mucho menos podrá hacerlo ahora, por vía excepcional de la ley habilitante, con tanta incapacidad de su tren de gobierno. En tercer lugar, habilitar al Presidente para que legisle más allá de la fecha de inicio del próximo período constitucional de los Diputados electos, resulta totalmente incongruente con lo que ha manifestado la soberanía popular en las pasadas elecciones. El 26 de septiembre se le dijo al Presidente, por mayoría, que queremos Diputados que asuman acertadamente sus funciones legislativas, para rescatar al país del caos en que se encuentra. Esa responsabilidad legislativa se la dimos los venezolanos electores a la próxima Asamblea Nacional y no al Presidente. Habilitarlo para extender la temporalidad de sus decretos hacia el año 2011, abdicando la Asamblea su potestad legislativa, irrenunciable en muchas materias del Artículo 187 constitucional, colocaría al Parlamento en un estado de hibernación, que resultaría inconstitucional y contrario al mandato soberano de los electores. Finalmente, una ley habilitante precisa de una condición de validez para toda ley, cual es la participación de los ciudadanos y la sociedad organizada en su formación. Ello lo contempla el Artículo 211 constitucional, y su procedimiento lo regulan los artículos 138 y siguientes de la Ley Orgánica de la Administración Pública. Todo intento de suplirlo con otro procedimiento, así lo califiquen de “consulta popular”, es nulo de nulidad absoluta. El Presidente Chávez, con los resultados electorales, acaba de quedar inhabilitado para legislar por decretos leyes. Y los Diputados electos, en una sola voz, en representación del país, deben rechazar este fraude constitucional.

sábado, 17 de julio de 2010

Pensamiento y Neurociencia

Isaac Villamizar
Un dicho popular señala que “loro viejo no aprende hablar”. Según la neurociencia, que estudia la estructura y la función, farmacología y patología del sistema nervioso, y de cómo los diferentes elementos del mismo interactúan y dan origen a la conducta, nuestro cerebro siempre está dispuesto para aprender cosas nuevas.
El cerebro está diseñado de tal forma que nos permite seguir aprendiendo a lo largo de nuestras vidas. Uno de los actuales estudios de la neurociencia es verificar cómo los pensamientos que tenemos literalmente se convierten en los eventos que experimentamos, las cosas materiales que poseemos e incluso la salud que disfrutamos. Los avances de las neurociencias demuestran que cada vez que pensamos producimos sustancias químicas, que a su vez son señales que nos permiten sentir exactamente cómo estábamos pensando. Si tenemos pensamientos de infelicidad, nos sentiremos desdichados. El problema es cuando empezamos a sentir de la manera infeliz que pensamos; y empezamos a pensar negativamente como la manera en que nos sentimos. El cuerpo, entonces, manda sobre la mente. Pero resulta que el cerebro tiene una naturaleza cibernética, lo que significa que actúa como una computadora, esperando que le sea instalado un programa. Es aquí donde está la clave, pues nuestra computadora mental, así configurada, realizará cualquier instrucción que se le dé. Lamentablemente, desde niños estamos usando programas negativos que recolectamos de otras personas o que desarrollamos a través de los años, como resultado de la repetición de nuestros pensamientos negativos. Nuestra computadora mental se programa así en el nivel de las creencias, hábitos y comportamientos automáticos.
La pregunta consecuente es cómo llegar a cambiar el ciclo. Al respecto, el principio de la neurociencia es que si las células neuronales se activan conjuntamente, ellas se entrelazan creando una conexión más permanente. Además, la neurociencia ayuda a cambiar la arquitectura neurológica de nuestro cerebro, mediante tres premisas. La primera es que hay una inteligencia superior dentro de cada quien, llamada divina, espiritual o subconsciente. La segunda es que nuestros pensamientos y nuestras propias reacciones pueden crear un cuerpo sano o un cuerpo enfermo. La psico-neuro-inmunología demuestra la conexión existente entre mente y cuerpo. La tercera es que cada persona puede reprogramarse a sí misma para llegar a ser otra. Todo lo anterior nos conduce a eliminar la programación vieja y negativa e instalar programas nuevos y positivos en el cerebro. Lo primero es comenzar el día planteándonos la mejor idea que podemos tener de nosotros mismos. Si las personas empiezan a decirse” yo puedo eliminar la culpa, la vergüenza, el miedo, la tristeza, la sensación de no merecer, de no valer, si desterramos los pensamientos destructivos, empezamos a liberarnos. ¡Hagámonos un diálogo interno constructivo! Otro método es la relajación. La meditación profunda, en la que se pierde la noción de tiempo y espacio, puede ayudar a la conversión. Es con ella con la cual el pensamiento se convierte en la experiencia en sí, en lo real que cualquier otra cosa. Las grandes ideas surgen cuando uno está relajado. Démosle nuevos conocimientos a nuestra mente y nuevas experiencias al cuerpo. Pasemos del pensar positivo, al hacer positivo, y de aquí, al ser positivo.

lunes, 5 de julio de 2010

Falacias de la Comuna

Isaac Villamizar
La Ley de Comunas de actual discusión se basa, entre otras, en tres falacias, que a la vez son aberraciones jurídicas constitucionales.
La primera es señalar en la Exposición de Motivos que se promueve la creación de una nueva instancia de gobierno territorial, la del poder comunal, con particularidades y características que la diferencian de las otras instancias de gestión gubernamental. A este embuste hay que agregarle el texto normativo del artículo 1, donde se afirma que con la entidad local socialista de la comuna los ciudadanos ejercen el Poder Popular; y del artículo 63, según el cual las instancias del Poder Popular surgen por iniciativa del pueblo organizado en ejercicio de su soberanía, ante cuyo Poder Popular supremo los demás órganos y entes del Poder Publico deben rendir sumisión y apoyo. Al respecto, es oportuno recordar que la Constitución, conforme a su artículo 7, es la norma suprema y el fundamento del ordenamiento jurídico. Todas las personas y los órganos que ejercen el Poder Público están sujetos a la Constitución. En la Constitución vulnerada a diario, no existe ningún “Poder Popular”, ni mucho menos un “Poder Comunal”. La Carta Magna es muy clara cuando dispone en su artículo 136 que en Venezuela el Poder Público se distribuye, territorialmente, entre el Poder Municipal, el Poder Estadal y el Poder Nacional; y éste se divide, funcionalmente, en Poder Legislativo, Poder Ejecutivo, Poder Judicial, Poder Ciudadano y Poder Electoral. Agrega la Constitución que es en estas ramas del Poder Público – no en otras ilusas - donde se ejercita el Principio de Colaboración entre Poderes.
La segunda falsedad de la Ley de Comunas es darle base legal a la Comuna en el artículo 173 de la Carta Magna, como menciona la Exposición de Motivos. Esta disposición remite a la legislación sobre el régimen municipal –no a una Ley de Comunas - para la creación de otras entidades locales dentro del territorio municipal. ¿Qué menciona la vigente Ley Orgánica del Poder Público Municipal, del 2009, sobre otras entidades locales municipales? Expresamente señala el artículo 19 ejusdem que además de los Municipios, son entidades locales territoriales los distritos metropolitanos, las parroquias y demás demarcaciones dentro del territorio del Municipio, tales como la urbanización, el barrio, la aldea y el caserío. Por ninguna parte aparece la Comuna en la ley que, constitucionalmente, tiene facultad para crear entidades locales. Por lo tanto, es una distorsión la base legal de la Comuna. Afirmar en esta ley que “la comuna es una entidad local socialista, constituida por iniciativa soberana del pueblo organizado, donde y a partir de la cual se edifica la sociedad socialista” y agregar que “la comuna debe organizarse a partir del ámbito geográfico determinado por el conjunto de comunidades que la conforman”, es la aberración jurídica constitucional más evidente del “Derecho Socialista”. La tercera argucia de la Ley de Comunas es pretender con la Comuna construir el “Estado Socialista”. El único Estado que conocemos por la Constitución, según sus primeros seis artículos, es el libre e independiente, el Estado democrático y social de Derecho y de Justicia, el Estado federal descentralizado en los términos consagrados en la propia Constitución, el Estado cuyos órganos emanan de la soberanía popular y no de imposiciones autócratas. Motivar en la Exposición de Motivos de esta Ley que la Comuna es un espacio socialista, que la Comuna promueve la construcción del Modelo Económico Socialista, que con la susodicha ley se abren las compuertas para la construcción de un espacio geográfico socialista, y agregar en el articulado que la ley establece las normas que regulan la edificación del Estado Comunal, es la trampa más grande de esta bazofia revolucionaria. Plantear en la ley, en su artículo 7, que la Comuna tiene como finalidad “desarrollar y consolidar el Estado Comunal como expresión del Poder Popular y soporte para la construcción de la sociedad socialista” es el zarpazo más hiriente y criminal que se le da a la Constitución.





Mi saludo cordial

Isaac Villamizar
El saludo, en cualquier cultura, denota la forma cortés en que una persona hace notar a otra su presencia o a través del cual se inicia una conversación. El ser humano es amistoso en su esencia, y el saludo es la apertura al diálogo. El apretón de manos y el beso es la manera más universal de saludar. El beso toma diferentes significados, dependiendo de la parte del mundo en que se dé.
En Europa lo más usual son dos besos en la mejilla entre personas conocidas, y un apretón de manos cuando no lo son. En Italia también son dos besos, pero comenzando desde el lado contrario y sin importar el sexo de la persona, al ser conocidos. En Bélgica, Alemania, Suiza y Holanda lo normal es dar tres besos, empezando por la derecha. En Rusia es conocida la tradición de los tres besos y en algunas regiones hasta seis. Persiste la costumbre antigua de besarse en la boca, tal como lo dejaron en recuerdo fotográfico los líderes soviético y alemán Breznev y Honecker. Los británicos, reacios al contacto, prefieren el saludo de manos. El beso esquimal no es otro sino frotarse la nariz, porque en su cultura besar significa olor. Las chicas de la Polinesia, al saludar, pegan su nariz a las de su pareja y aspiran por unos instantes. En Hawaii – tal como nos ocurrió – al bajar del avión lo típico es ser recibido con un beso y la Flower Lei o Guirnalda de orquídeas y nardos, la cual deberá ser retirada en privado. En América Latina lo normal es un solo beso en la mejilla entre conocidos y familiares, a excepción de Argentina, en donde los hombres suelen darse dos besos. En tribus africanas de Malawi se saludan con la intervención y movimiento de los genitales y pechos, hasta cierto número de veces, pues más allá implicaría una incitación. Consideran un peligro besarse, pues desde la antigüedad creen que el alma se les puede escapar por la boca. En China y Japón no se tocan para nada. Se inclina la cabeza y mientras mayor la reverencia, mayor el respeto. Los besos apasionados se dan en el cuello o en las manos, pero nunca en los labios. En la India, con las manos juntas en el pecho, se dicen “Namaste”. Si la persona es de mayor rango, se inclinan y se tocan los pies. En los musulmanes lo más común es estrechar las manos, mientras dicen “salam aleikum”, tanto entre hombres como mujeres. Pero entre ambos nunca se tocan, a no ser que sean familiares, dándose una palmada en la espalda, proseguida de tres besos. En Venezuela es muy común utilizar expresiones muy coloquiales como “epa”, “épale”, “qué más”, entre amigos y en un contexto muy informal, lo cual es común entre hombres.
Las relaciones humanas enseñan que un saludo verbal, acompañado de una sonrisa y el nombre de la persona a quien saludamos, nos abren muchas puertas y causan grata impresión desde el comienzo. En el chateo y redes sociales del mundo informático amistoso de hoy, el saludo ya ha tomado su particularidad. Se dan toques digitales, se envían emoticonos para reforzar las expresiones de saludos afectuosos, y hasta se llama la atención del internauta con zumbidos. En nosotros ha quedado enraizado el saludo flemático y reservado inglés, que nos en enseñaron, de niño, en Riverston School, en Londres. Siempre al intentar guardar las distancias, en un primer momento, ofrecemos la mano tanto a hombres como mujeres, acompañado de nuestro nombre. Con la familiaridad se hace efusiva nuestra sangre latina, para combinar el beso a la dama con “mi cordial saludo”, “mi aprecio de siempre”, “mi cariño y mi estrecho abrazo.”



Percepción Socialista

Isaac Villamizar
Todos los seres humanos captamos estímulos mediante sensaciones. Estas corrientes de información nos llegan a través de los cinco sentidos. Al llegar al cerebro, le damos un significado, con base a nuestras experiencias. A esto es lo que, en Psicología, se llama percepción. Ella es el proceso mediante el cual el individuo selecciona, organiza e interpreta la información sensorial, para crear una imagen significativa del mundo. La percepción de una situación influye en la forma de actuar de una persona motivada.
La percepción es el primer proceso cognoscitivo por el cual el individuo capta datos del exterior y con el cual la especie animal, incluido el ser humano, forma una representación de la realidad de su entorno. En la percepción se encuentran inseparablemente las sensaciones con los elementos interpretativos. El proceso de percepción es de carácter inferencial y constructivo, generando una representación interna de lo que sucede en el exterior al modo de hipótesis. Para ello se usa la información que llega a los receptores y se va analizando paulatinamente, así como información que viene de la memoria, tanto empírica como genética, que ayuda a la interpretación y a la formación de la representación. La memoria contribuye a terminar de completar la decodificación e interpreta el significado de lo recuperado, dando significado, sentido y valor. Esto permite la generación de un modelo.
Los mercadólogos estamos claros que pueden surgir diferentes percepciones del mismo estímulo, debido a tres procesos de percepción: la atención selectiva, la distorsión selectiva y la retención selectiva. En la atención selectiva se conoce que la gente está expuesta a una norme cantidad de estímulos diarios, pero es más probable que advierta los estímulos que espera y estén relacionados con su necesidad presente. La distorsión selectiva describe la tendencia de la gente a tergiversar la información, de acuerdo con sus propias ideas. Aquí la gente interpreta la información de manera que ésta apoye en lugar de contradecir sus preconcepciones. La información que recibe la adecúa, a toda costa, con la que ya existe en su mente. Según la retención selectiva, la gente olvida mucho lo que aprendió, pero tiende a retener en la memoria la información que apoya sus actitudes y creencias. Se inclinará a recordar los puntos positivos de una situación y a rechazar u olvidar los negativos.Este socialismo manipulador de estímulos, conoce todo lo que hemos expuesto. La mayoría de la gente se pregunta por qué los adeptos a este proceso revolucionario van contra la pared, contra la realidad, contra toda lógica. Es porque su percepción es muy distinta a la nuestra. Ha sido maniobrada la información para estimular en los pobres incautos un modelo muy diferente de la realidad. Es su realidad intervenida por los especialistas revolucionarios en maniobrar la atención, distorsión y retención selectiva de la percepción. Por eso, si la comida se pudre, para ellos no importa. De algún lado saldrá comida buena. Si el país se cae pedazos en empleo, PIB, inflación, ello no es cierto, porque hemos tenido el mayor crecimiento económico en América Latina. Si la producción interna y el sector privado están furibundamente lesionados, así debe ser porque para eso el gobierno importa y los pobres deben tener lo mismo que los ricos, sin trabajarlo. Por eso, en la artimaña socialista de la percepción, la mentira se convierte en verdad o viceversa.







Abogado prudente

Isaac Villamizar
En nuestros 25 años de ejercicio profesional.
La prudencia es la virtud de actuar en forma justa, adecuada y con cautela. Los Escolásticos la definían como la “recta ratio agibilium”. Es la virtud de comunicarse con los demás a través de un lenguaje claro, literal, cauteloso y pertinente. La prudencia implica respetar los sentimientos, la vida y las libertades de las demás personas.
Quien es prudente se adelanta a las circunstancias, toma mejores decisiones, conserva la compostura y el trato amable en todo momento. La persona prudente forja una personalidad decidida, emprendedora y comprensiva. La prudencia nos ayuda a reflexionar y a considerar los efectos que pueden producir nuestras palabras y acciones, teniendo como resultado un actuar correcto en cualquier situación, por difícil que sea.
El valor de la prudencia no se cultiva a través de una apariencia, sino por la manera en que nos conducimos ordinariamente. Lo que nos cuesta más trabajo en realidad es pensar y conservar la calma cuando se presentan los problemas. La gran mayoría de nuestros desaciertos en la toma de decisiones, en el trato de las personas o al formar opinión, se deriva de la precipitación, la emoción, el mal humor, una percepción equivocada de la realidad o la falta completa y adecuada de información.
La falta de prudencia siempre tendrá consecuencias en todos los niveles, ya sea personal y colectivo, según sea el caso. El ser prudente no significa tener la certeza de no equivocarse. Por el contrario, la persona prudente muchas veces ha errado, pero ha tenido la habilidad de reconocer sus fallos y limitaciones, aprendiendo de ellos. Ella sabe rectificar, ofrecer disculpas, pedir perdón y solicitar consejo.
El valor de la prudencia nos hace tener un trato justo y lleno de generosidad hacia los demás, edifica una personalidad recia, segura, perseverante, capaz de comprometerse en todo y con todos. La persona prudente genera confianza y estabilidad en quienes le rodean, seguros de tener un guía que los conduce por un camino firme.
En la Universidad nos enseñaron que una de las cualidades más preciadas en un abogado era la prudencia. Un abogado prudente nunca se atrevería a poner en riesgo su prestigio profesional, cometiendo una irreflexión, una torpeza, una indiscreción. Un abogado prudente siempre asesoraría con el criterio más conveniente para su cliente. Un abogado prudente evitaría tomar al pie de la letra todo lo que oye o lo que lee. Un abogado prudente siempre pensaría antes de actuar. Un abogado prudente sería siempre discreto y no revelaría los secretos que le confiaran. Un abogado prudente tomaría como regla el no hablar más de la cuenta en cualquier ocasión. Un abogado prudente prevería las consecuencias que su consejo o que sus actos pudieran tener en el ejercicio del Derecho.Un abogado prudente sabría que depositan en él sentimientos encontrados, alegrías y frustraciones, dichas y penas, con los cuales habría que trabajar con tino. Un abogado prudente estaría claro que en muchas ocasiones la integridad y las libertades fundamentales de su cliente estarían en sus manos, para preservarlas con el consejo y orientación oportuna. Ese es el propio valor de la prudencia en un abogado. Esa es la prudencia que hemos aprendido a ejercer en 25 años. No en vano, Calderón de la Barca afirma: “El valor es hijo de la prudencia, no de la temeridad.”



Madre sin vida

Isaac Villamizar
A toda madre le encanta que la atiendan. Se siente halagada si están pendientes de lo que le gusta y le hace falta. Pero el esmero en complacer sus requerimientos no debe ser sólo de la familia. El Estado, según el postulado constitucional, debe proteger integralmente a la maternidad, que no sólo se impone prestar hasta el parto y el puerperio, sino también en la condición que ella asume para sostener un hogar.
La ONG Save the Children acaba de publicar, por undécima vez, su Informe anual sobre los mejores y peores países del mundo para ser madre. La clasificación muestra las enormes diferencias, de vida o muerte, entre dar a luz en uno u otro país. Noruega encabeza el listado del cuidado ideal para las mamás. Una mujer nórdica que hoy dé a luz ha elegido el momento para quedar embarazada, después de recibir 18 años de educación y utilizar métodos anticonceptivos para tener el control sobre su vida sexual. Tras el parto, asistido por personal médico ultra capacitado, disfrutará de licencia postnatal entre 46 y 56 semanas. Muy difícilmente verá morir a su hijo antes de los 5 años. Y si todo va bien, ella vivirá hasta los 83 años. Después de Noruega siguen en el ranking Australia, Islandia, Suecia, Dinamarca, Nueva Zelanda, Finlandia, Países Bajos, Bélgica y Alemania.
En la cola está Afganistán, en el puesto 160. Una mujer afgana, el día del parto, tendrá un alto riesgo de morir. Una de cada ocho fallecerá por complicaciones antes o después del nacimiento. Sólo el 14 % de las madres serán asistidas en el alumbramiento. En Afganistán la mujer únicamente ha ido 5 años al colegio y sólo el 16 % usa anticonceptivos. Su expectativa de vida no pasa los 44 años. Y alguno de sus hijos morirá antes de los 5 años, por una enfermedad fácilmente evitable.Venezuela se encuentra en un lejano puesto 63 del listado. En nuestro país la mayoría de los hogares monoparentales son de madre soltera, que no puede, como mujer sola, costearse el cuidado infantil ni puede permitirse el lujo de una casa decente. El 12 % de las muertes maternas son por aborto en adolescentes. Una madre nuestra soltera y precoz no tiene acceso a la leche, al queso, a la mantequilla, a los nutrientes y a las vitaminas, menos aún con este desabastecimiento. Una madre soltera venezolana no tiene tiempo para realizarse como tal, de disminuir su ritmo de vida, de tranquilizarse durante el postnatal, de disfrutar plenamente de sus hijos bebés. Porque una madre venezolana tiene una inmensa responsabilidad en mantener un trabajo a tiempo completo, si lo consigue. Una madre venezolana tiene gastos adicionales para encontrar a alguien que cuide a los niños mientras está en su trabajo. Una madre venezolana, si no tiene un seguro de vida colectivo en su labor, no puede pagar una prima para cubrir una póliza suficiente.



Con la nariz tapada

Isaac Villamizar
La FAO reveló en el 2009 que existen 6.800 millones de habitantes en el mundo, de los cuales 1.020 millones son desnutridos crónicos. Según la OMS, 884 millones no tienen acceso a agua potable y hay 18 millones de muertes por año debido a la pobreza, la mayoría de ellas en niños menores de 5 años.
2.300 contenedores de PDVAL, con más de 70.000 toneladas de alimentos descompuestos, entre ellos carne, pernil, arroz, pasta, leche en polvo, mantequilla, sal y aceite, no sólo es la evidencia de cómo este gobierno ataca a los pobres por donde son más débiles, el estómago. Es también el destape de cómo esta revolución, imbuida en la corrupción, tiene 11 años oliendo a nauseabunda.
La patria socialista como no ha podido afincar su ideología trasnochada, cumpliendo al pie de la letra su vergonzoso lema, ha decretado la muerte por hambre de los pobres venezolanos. Es una actitud de miseria, de podredumbre, de desventura oficial. Y mientras tanto, el gobierno pretende esconder su ineficacia y torpeza en el manejo de la importación y distribución alimentaria, atacando ferozmente al sector productivo privado, que es el empleador y abastecedor, con calidad, de la poca estantería que se observa surtida. Es un gobierno que arrasa, cual marabunta, todo lo que encuentra a su paso y le pone ganas arbitrarias, volviéndolo añicos. Se come lo bueno y deja lo podrido al sector desnutrido. Es, ni más ni menos, el auténtico Capitalismo de Estado.
Lo paradójico es que la Constitución vigente, fruto del pensamiento oficialista, pregona en su artículo 305 que la seguridad alimentaria se entiende como el acceso oportuno y permanente a los alimentos por parte del público consumidor; que la seguridad alimentaria se alcanza desarrollando y privilegiando la producción agropecuaria interna (no en contenedores de puertos). Es más, la Carta Magna califica la producción de alimentos (no su importación) como de interés nacional y fundamental para el desarrollo económico y social de la Nación. Y la incongruencia gubernamental prosigue con los postulados de la Ley para la Defensa de las Personas en el Acceso a los Bienes y Servicios, reformada recientemente por el oficialismo, según Gaceta Oficial 39.358 del 01 de Febrero de 2010. Allí se asegura que la norma pretende la defensa, protección y salvaguarda de los derechos e intereses individuales y colectivos en el acceso de las personas a los bienes y servicios, para la satisfacción de las necesidades, en resguardo del derecho a la vida y la salud del pueblo. Como se nota, nada más lejos de la verdad. Este es un gobierno que en 11 años ha sido sordo, ciego y mudo ante los verdaderos requerimientos del pueblo y ante el progreso efectivo de la Nación. Pero ahora, a su actitud indolente, hay que sumarle su condición maléficamente inodora. Porque ante tanta corrupción y descompostura, camina por la senda tortuosa revolucionaria, con la nariz tapada.

domingo, 30 de mayo de 2010

Exijo mis derechos

Isaac Villamizar
El ser humano tiene reconocidos una gama de derechos por el simple hecho de ser persona. Ese reconocimiento se lo da un conjunto de normas que sirven de sustento para que el individuo reclame el respeto y garantía de su cumplimiento. Sin embargo, nada se hace si el propio titular de sus derechos no sabe exigirlos de manera firme.
Una de las formas en que procede tal reclamación es a través de la palabra, sea escrita u oral. Las personas que saben exigir lo que les corresponde expresan sus sentimientos de manera eficaz y pueden defenderse sin dominar a los demás. Son este tipo de personas quienes saben reclamar sus derechos sin violar los derechos de otros y cómo exigir respeto sin ser irrespetuosos.
En este sentido, es posible ser afirmativo sin atacar a los demás. Las personas que son afirmativas en la exigencia de sus derechos creen que tanto ellas como los demás merecen respeto. Las personas afirmativas se dan cuenta que son importantes y también se dan cuenta de que el universo no gira sólo alrededor de ellas, sino que existen otras personas que también tiene deseos, necesidades y derechos.
En la reclamación de nuestras potestades podemos atrevernos a sostener nuestros principios firmemente. Si se tiene que decir no, a quien nos presiona para que digamos lo contrario, hay frases adecuadas: “No, gracias; no quiero. Nunca he hecho eso, y espero que ésta no sea la primera vez.” Otras frases a tales efectos pudieran ser: “Yo no puedo hacer eso...” “Nunca acostumbro...” “Siempre acostumbro…” “Como cuestión de principio, yo…”
En ocasiones la gente pretende desconocer nuestros intereses. Es cuando debemos manifestar claramente nuestras preferencias. Tal vez no logremos cambiar los puntos de vista y las decisiones de los demás, pero les hará tomar conciencia a ellos de que nosotros tenemos ciertos valores y que queremos que nos tomen en cuenta cuando se tomen decisiones que pudieran afectarnos. “Yo quisiera” “A mí me gustaría” “Yo preferiría”, son palabras que denotan cuál es el nivel de nuestra preocupación.
Sin tapujos uno debe expresar lo que piensa cuando hay conflicto en desacuerdos, siempre en búsqueda de la avenencia: “He estado preocupado durante algún tiempo acerca de…” “He estado deseando hablar con usted acerca de…” “Hay algo que desde hace algún tiempo me preocupa y quiero decírselo a usted…”Finalmente, hay que plantear claramente que estamos en conocimiento pleno de los derechos que nos corresponde y que estamos dispuestos a exigir su respeto. “Sé que estoy facultado para…” “Reconozco sus derechos y los respeto ampliamente, pero también quiero exponerle los míos.” “Creo que si nos respetamos mutuamente en nuestros derechos, podemos entendernos magníficamente.” “Yo vengo a exigir mis derechos porque creo que la ley me los reconoce.” “Usted tiene derecho a exigir lo suyo, tanto como yo tengo el de exigir lo mío.” “Pienso que es justo que Ud. reclame sus derechos. Igual pienso que me corresponde a mí.”

Soy amigo de Imperios

Isaac Villamizar
La dominación de todo el planeta por una sola autoridad única y universal ha sido cuestión de ficción. Sólo en las películas podría darse. Pero más de un caudillo ha acariciado la idea tentadora de ser el amo y señor. En su afán expansionista, ¿cuál pudo ser el límite en las mentes de Alejandro Magno, Julio César, Felipe II y Napoleón?
La dominación puede ser religiosa, en la tarea de convertir a tanta gente como sea posible en una religión. También puede ser política, cuando una ideología ve en su credo el ideal de una organización social, lo que dio en llamarse, después de la Guerra Fría, como Nuevo Orden Mundial. Incluso Sociedades y Hermandades secretas y sombrías – según textos apócrifos – están dedicadas a tomar el control del mundo. En verdad, Imperio tradicionalmente se ha referido al poder de un Estado que ha dominado los territorios de varias naciones y a cuyo frente ha estado un Emperador. Se ha caracterizado por uniones de territorio bajo un mismo ordenamiento militar o administrativo, organizados por personas de una misma etnia o civilización, agrupados en torno a un líder, elegido o hereditario. El primer gran Imperio conocido del mundo fue el persa. En los años 520 aC, gracias a las conquistas de Ciro II y su hijo Cambises II, fue la primera superpotencia única, y para 500 aC, con Darío, alcanzó su máximo esplendor. Su dominio se extendió por el sur de Rusia y Ucrania, el norte de Mesopotamia y Siria y el actual territorio de Irán. El último Estado que llevó oficialmente el término fue el Imperio japonés, que eliminó esta denominación tras el drástico cambio de su política exterior, al final de la Segunda Guerra Mundial.
Imperios han habido en todos los continentes. El Imperio Inca llegó hasta Bolivia y el noroeste de Argentina. El Imperio de Brasil fue un estado existente entre 1822 y 1889, que precedió a la proclamación de la República y la constitución de los Estados Unidos de Brasil. En Asia el Imperio chino se extendió desde la dinastía Qin, año 221 aC, hasta la caída de la dinastía Qing, en 1911. El Imperio ruso se extendió por 200 años, desde 1721 hasta 1917, y abarcó grandes zonas de los continentes europeo, asiático y norteamericano. La Rusia Imperial conquistó territorios comprendidos entre el mar Báltico y el Océano Pacífico, con las dominaciones iniciadas por Pedro I, hasta el reinado de Nicolás II, el último Zar.
El Imperio Británico - del cual me declaro subyugado, con el mayor orgullo - comprendió los dominios, colonias, protectorados, y otros territorios gobernados o administrados por el Reino Unido, entre los siglos XVI y XX. A comienzos del siglo XX, el Imperio británico abarcaba una población cerca de 528 millones de personas y unos 33.670.000 Km2, lo que significaba una cuarta parte de la población mundial y una quinta parte de las tierras emergidas. Los rasgos de mi personalidad y una parte esencial de mi formación se la debo a mi educación londinense. ¡Viva el Imperio!No hay duda. El gobierno venezolano es amigo de Imperios o por lo menos de países que han sido parte de ellos. Tal vez por ello también se ha dejado encantar por lo que significa la expansión continental del poder y del dominio, para atreverse a llevar el socialismo del siglo XXI y la espada de Bolívar por la América Latina. Es el Imperio venezolano, rico en petróleo y, realmente, pobre en su esfera de influencia.

Presumo tu buena fe

Isaac Villamizar
Cuando el mesonero coloca la bebida en la mesa, espera que el cliente no se vaya sin pagar. Cuando cobramos un cheque en el Banco, aspiramos a que el cajero nos entregará el dinero son faltar un centavo. Son expresiones éstas sencillas y cotidianas de buena fe. Ella debería estar siempre presente en las relaciones humanas, en los intercambios que prescinden de testigos, de filmaciones, de documentos estrictos.
De la buena fe se habla mucho, pero se ejercita poco. En vez de ser valorada como un bien, como un tesoro, pareciera estar en vías de extinción, pues ha sido sustituida por la malicia y el interés.
En la buena fe suponemos que tanto uno como el otro tenemos la intención de obrar honestamente, ya que ella implica la idea de rectitud, de corrección, de lealtad.
La buena fe constituye un principio que obliga, asimismo, a que las autoridades públicas y la ley presuman la buena voluntad en la actuaciones de los particulares. En otras palabras, en todas las gestiones que adelanten los administrados con la autoridad pública se debe presumir la buena fe. Ella ha sido, desde tiempos inmemoriales, uno de los principios fundamentales del Derecho. Constituye el deber de proceder con honestidad en nuestras relaciones jurídicas, y es el derecho a esperar que los demás procedan de la misma forma. Los actos jurídicos deben ser cumplidos con intención recta y positiva, para que así pueda realizarse cabal y satisfactoriamente la finalidad social y privada a que obedece su celebración. En general, las personas proceden de buena fe, es lo que usualmente ocurre. Además, actuar con mala fe cuando media una relación jurídica, en principio, constituye una conducta contraria al orden jurídico y sancionada por éste. De allí que la regla general es que la buena fe se presume, y la mala fe debe probarse.
Si la buena fe fuera una regla aceptada por todos no sería necesario presentar nuestra cédula o nuestra partida de nacimiento para acreditar quiénes somos. Bastaría nuestra palabra y nuestra presencia física. Pero parece que una constancia o certificado escrito tiene mayor valor que nuestra aseveración. En nuestras conversaciones diarias podemos demostrar que actuamos bajo la presunción de buena fe. Con las palabras correctas podemos decirle al otro que la confianza y la lealtad van por delante y que captamos de entrada su sinceridad, su llaneza y su buena voluntad. Expresemos la buena fe con frases como éstas: “Yo te creo.” “Confío en usted.” “Lo que Ud me dice es muy cierto.” ”Yo aprecio su actuación.” “Aplaudo su interés.” “Ud me ha inspirado una gran seguridad.” “Tú eres un amigo muy leal.” “Tú siempre estás dispuesto a ayudar.” “Tranquilo, no me des explicaciones, yo confío plenamente en lo que dices.” “Yo no te juzgo. Tú tienes tus propios motivos, y yo estoy seguro que no hiciste eso intencionalmente.”

Te tengo confianza

Isaac Villamizar
Con frecuencia sentimos necesidad de dejar saber nuestros sentimientos, pensamientos íntimos, emociones y reacciones a otra persona, buscando apoyo y aceptación. Es una sensación urgente de compartir sobre nosotros mismos, esperando del otro que respete nuestras confidencias y que no las haga públicas. Hablamos, entonces que le tenemos a esa persona confianza. Pero este sentimiento tiene varios significados. No sólo como una familiaridad en el trato, sino también como la seguridad en uno mismo o en las propias cualidades. Igualmente, la confianza denota la esperanza firme o seguridad que se tiene en que una persona va a actuar o una cosa va a funcionar como se desea.
En este sentido, en la Psicología Social y en la Sociología, la confianza configura una hipótesis que se realiza sobre la conducta futura del prójimo. Se trata de una creencia que estima cómo una persona será capaz de actuar de una cierta manera frente a una determinada situación. Ello sucede cuando decimos: “Voy a contarle todo a mi padre; tengo confianza en que me entienda y me ayude.” La confianza, en este caso, es una actitud que concierne al futuro, en la medida en que éste dependa de la acción de un otro. Estamos apostando a no inquietarnos por el no control del otro y del tiempo. Entonces, con la confianza se suspende temporalmente la incertidumbre acerca de las acciones de los semejantes, y así es posible un cierto grado de regularidad y predicción en las acciones sociales.
La confianza se ve más o menos reforzada en función de las acciones de la otra persona y de la experiencia. Si el padre ayuda al hijo, la confianza saldrá fortalecida; de lo contrario, se verá traicionada y, en el futuro, lo más probable es que el hijo no actúe de la misma forma. Pero, asimismo, si nosotros cometemos un error o nos lo cometen, terminamos perdiendo confianza. Y empezamos a comparar. Sacamos conclusiones de nuestros logros en el pasado; evaluamos la conducta de nuestros padres, amigos, profesores y socios; calificamos si nos fue bien o mal en anterior ocasión. Así comienzan las dudas.
¿Por qué nos cuesta trabajo desarrollar confianza en los demás? Tal vez hemos sufrido un abuso o abandono físico o afectivo; es posible que nos hayan rechazado por aquello que sentimos o creemos. Quizá nos han herido emocionalmente en el pasado, y no estamos dispuestos a que nos lo hagan de nuevo. Tal vez acabamos de pasar por alguna relación problemática, en la cual se nos maltrató, no se nos comprendió, o se nos ignoró. Puede ser que hemos crecido en una ambiente impredecible y volátil. Las personas con una sana autoestima se comportan con confianza. En cambio las que la poseen en grado pobre, ni siquiera tienen confianza en sí mismas. Ayudarnos a construir confianza es un proceso de aprendizaje. Hay que comenzar por elaborar confianza en uno mismo. Piense siempre en un final ganador. Si no llegó al menos lo intentó. Haga una lista de lo que le gusta a sí mismo y de lo que sabe hacer mejor. Léala con frecuencia. Recuerde que no necesita el valor de otra persona para saber quién es usted. Hable con esa persona que usted estima comprensiva, cuando se sienta en una situación delicada. La retroalimentación positiva que reciba le aumentará su confianza. Asuma acciones de riesgo. Enfréntese al miedo. Haga lo que nunca hizo. Salir airoso de esas situaciones incrementará la seguridad en sí mismo.

Te pido respeto

Isaac Villamizar
El respeto es el puente esencial en los contactos interpersonales. Consiste en reconocer los intereses y sentimientos en una relación. El respeto no sólo se da en los vínculos individuales. Ocurre igualmente en las relaciones intergrupales y entre países y organizaciones de diversa índole. El respeto es una actitud. No consiste en los buenos modales o amabilidad. Es el reconocimiento de la persona como individuo, que necesita que se le comprenda. Básicamente, es aceptar y descifrar tal y como son los demás, aceptar y entender su forma de pensar, aunque no sea igual a la nuestra. El respeto se debe dar incluso si pensamos que el otro está equivocado. El respeto es aceptar y comprender al humilde y al engreído, al pobre y al rico, al sabio y al ignorante, porque todo ser humano merece nuestra atención, sin importar su condición. Si alguien actuó mal, debemos respetarlo e invitarle hacia el camino correcto, sin imponerlo.
Respeta al humilde pero honesto, porque sin su trabajo su vida sería una desdicha. Respeta al engreído, porque gracias a su actitud tu puedes conocer la sencillez; respeta al colérico, porque gracias a su rabia aprendes sobre la importancia de saberse controlar.
No sólo las personas merecen nuestro más profundo respeto. También las plantas, los animales, los ríos, lagos y mares, pues la creación es el regalo más grande que se nos ha dado. Ni hablar del respeto a los derechos de los demás y el respeto a las leyes. Pero, ¡qué difícil se hace! El carro que no arranca inmediatamente al cambiar el semáforo nos hace presa fácil de la intolerancia. Es que el respeto, muchas veces, se pierde desde la infancia. Pero es, precisamente, desde los comienzos cuando, poco a poco, se puede cultivar en el corazón, alimentando esta actitud con su ejercicio constante. Las tentaciones para sucumbir pueden ser muchas, pero mantengámonos firmes, que la perseverancia rendirá sus frutos.
Hay procederes diarios que nos ayudan a fortalecer el respeto. Los podemos convertir en buenos hábitos. Pronto veremos resultados maravillosos. Escucha con atención. Mira con respeto a todas las personas que se cruzan en tu camino. Dale el buen día o agradécele con sentimiento. Adopta la decisión de aprender del otro. El mundo cambia vertiginosamente y tú con él. Cada persona en tu vida es una ocasión para aprender y crecer. Colócate en los zapatos de los demás. El otro puede estar viviendo una situación difícil que tú desconoces. Trata de pensar y sentir como lo está haciendo la otra persona. Descubre su punto de vista. No seas intransigente. No desprecies y apartes a otros porque no hacen lo que tú quieres o deseas. Inyéctate de paciencia y compresión. Siempre podemos cambiar nuestra actitud o comportamiento. Nadie es más o menos que tú. Cada quien es como es. Cada uno llega a este mundo con virtudes y defectos. Estos últimos podemos resolverlos y de ellos meditar. El ejemplo es el mejor riego. Desde niños comenzamos a incorporar los valores esenciales. Enséñales a tus hijos con tu respeto hacia ellos. La próxima vez que vayas a entrar a su cuarto, tócale la puerta primero. De esa manera él tocará la tuya y ganarás su respeto. Una de los principios fundamentales de la doctrina budista es la fe en la ilimitada dignidad del ser humano, y dentro de esa tradición oriental, el diálogo puede conseguirse a través de una interacción abierta y el respeto. No en vano el Dalai Lama asegura que: “La amistad sólo puede tener lugar a través del desarrollo del respeto mutuo y dentro de un espíritu de sinceridad.”

Sin presupuesto no hay futuro

*Isaac Villamizar
En el desarrollo de cualquier país hay una tríada indisoluble. Por una parte está el Estado que, con su institucionalidad, fija políticas públicas, entre ellas las educativas, y genera condiciones favorables para un adecuado progreso. Por la otra, está el sector privado que, con sus recursos financieros y su talento humano, produce bienes y servicios, obteniendo rentabilidad económica y social. En un vértice de este vínculo está la sociedad que, con sus requerimientos, espera obtener también unos beneficios. Esta relación amerita de iniciativas conjuntas y coordinadas, en las que cada sector contribuya con sus recursos esenciales para comúnmente impulsar el avance social, económico, político y cultural de la Nación.
El Estado tiene unos fines esenciales, contemplados en el artículo 3 constitucional. Entre esos objetivos primordiales están la defensa y desarrollo de la persona y el respeto a su dignidad; la construcción de una sociedad justa y amante de la paz; y la promoción de la prosperidad y bienestar del pueblo. Agrega este postulado de la Carta Magna que la educación es un proceso fundamental para alcanzar estos fines. Las Universidades Nacionales son parte del Estado. La Universidad es un actor primordial para la vanguardia de los adelantos patrios. Ella siempre está estrechamente conectada y preocupada por los problemas y aconteceres críticos del país. Por lo tanto, requiere del apoyo del resto del estamento público, en esa corresponsabilidad que tiene de contribuir a la subsistencia del Estado.
Un presupuesto, en su concepción básica, es un plan de carácter operativo en el cual una institución hace unas estimaciones, en términos financieros y cuantificables, de sus necesidades durante un período. Un presupuesto es un valioso instrumento que obliga a la organización a reflejar por adelantado la construcción de un futuro. En el presupuesto hay una previsión por anticipado de lo que va a ocurrir con el funcionamiento de la institución.
Si la Universidad no cuenta con los recursos presupuestarios suficientes, es difícil generar un producto académico de calidad, que es el beneficio esperado por la sociedad. Si la Universidad tiene limitaciones financieras, ello afectaría gravemente la función rectora que ella tiene en la educación, en la ciencia y en la cultura. Pero, lo más grave, si la Universidad tiene una estrechez presupuestaria, no podría aportar eficiente y efectivamente a su corresponsabilidad en los logros de los fines esenciales del Estado. Sin presupuesto universitario no se puede colaborar en el desarrollo y formación integral de la persona. Sin presupuesto universitario no se puede construir una sociedad con plena introspección de la paz. Sin presupuesto universitario no se puede fomentar el bienestar de la comunidad. Sin presupuesto universitario no se puede edificar futuro.
Como integrante de una comunidad universitaria, como natural de este lar torbesino, quiero invitar a la sociedad tachirense a tomar una causa, que debe ser también nacional. Así como el pueblo ha salido en voz unísona a defender la libertad de expresión, el no cierre de los medios, y el derecho que todos tenemos de recibir y difundir la información, exhorto a esta tierra de grandes luchadores para salir en defensa de otro derecho fundamental: el de la educación. Es el derecho que tiene el colectivo de asegurar que su Universidad siga cumpliéndole en la oferta y producción de la Educación Superior. *Consultor Jurídico de la UNET

Nulidad de la LOE

*Isaac Villamizar
He leído con específico interés y análisis jurídico la acción de nulidad por inconstitucionalidad de la Ley Orgánica de Educación. El Recurso ha sido interpuesto, el pasado 07 de Octubre, por los Rectores de la UCV, ULA, LUZ, UC, USB, UNET, UNEXPO, UCAB y la Decana de la Facultad de Ciencias Jurídicas de LUZ. Han sido asistidos por un grupo de connotados juristas, encabezados por el colega Consultor Jurídico de la UCV, Dr. Manuel Rachadell, acompañado de Ex Magistrados del TSJ y de la Corte Contencioso Administrativo, así como de reconocidos abogados constitucionalistas y administrativistas. Concretamente, quiero referirme a la primera parte del documento, en donde exponen las razones de hecho y de derecho que vician el procedimiento de discusión y aprobación en la Asamblea Nacional de la LOE y que, a juicio de los demandantes, invalidan totalmente la ley. Bajo mi criterio, este capítulo, referido al Derecho Adjetivo, está sólidamente fundamentado y de su lectura se desprende un hecho público, notorio, comunicacional y reiterativo que ocurre en el actual parlamento venezolano y que, ex profeso, pretendo comentar al final de la presente columna.
¿Cuáles son los hechos? La Asamblea Nacional, en el período 2000-2005, aprobó en primera discusión el 21 de agosto de 2001, un proyecto de LOE que contenía 127 artículos. Y allí quedo archivado. En un nuevo período legislativo, el actual, intempestivamente, el 6 de agosto de 2009, la Presidenta de la Comisión de Educación presenta a la plenaria un supuesto informe de la ley, sin que tuviera las modificaciones, adiciones o supresiones derivadas de la primera discusión, en violación del artículo 208 constitucional y sin que los propios diputados de la Comisión lo conocieran. En realidad, se trataba de un nuevo proyecto de ley, con 56 artículos, sustancialmente diferente al del 2001. En este sentido, la Sala Constitucional, en jurisprudencias vinculantes del 20 de agosto de 2004 y del 18 de mayo de 2006, ha asentado que los actos de la Asamblea Nacional, en el proceso de formación de la ley, están sujetos al control de la constitucionalidad; y que cuando un procedimiento de discusión de una ley, con todos sus pasos hasta la publicación del texto en Gaceta, no culmina en un período parlamentario, ha operado un decaimiento del proceso legislativo, responsabilidad por omisión que no puede trasladarse a los legisladores del período siguiente. La vigente Ley Orgánica de Educación, en consecuencia, tuvo una sola discusión en plenaria, que se inició a las 3 pm del jueves 13 de agosto y terminó a las 2 am del viernes 14 de agosto, lo cual transgredió el artículo 207 constitucional, que ordena dos discusiones para una ley.Toda esta acumulación de vicios y de actuación grosera de la Asamblea Nacional, transgrediendo normas expresas constitucionales que regulan la formación y aprobación de una ley, revela algo que los venezolanos observamos a diario en el Hemiciclo. No es otra cosa sino el abuso de poder con el cual se vanaglorian los diputados oficialistas, que se creen infalibles y por encima de la norma suprema. Su actuación de aplanadora, sumisa al Poder Ejecutivo, y retadora a cualquier tipo de control, hace elevar al Parlamento a la categoría de las instituciones más desprestigiadas en el colectivo nacional. La pregunta obvia es: ¿Convalidará el TSJ este abuso de poder de la legislatura, al archivar este recurso de nulidad, pronunciarse sobre su inadmisibilidad o declararlo sin lugar? *Consultor Jurídico de UNET

domingo, 28 de marzo de 2010

Derecho por Internet

*Isaac Villamizar
Internet ya no sólo se usa para fines académicos, empresariales o militares. Con su proceso de expansión se ha abierto a todo el conglomerado, que le ha configurado una dinámica inimaginable. Es evidente que la sociedad ha encontrado múltiples beneficios de la conexión en red, lográndose el intercambio de bienes y servicios en un mercado globalizado, y extendiendo la cultura y educación por aulas virtuales. Pero asimismo, la comunidad cibernauta ha visto con preocupación los cada vez más frecuentes usos indebidos de los sistemas informáticos. Internet plantea numerosas interrogantes jurídicas. En un bloque está lo relativo a la regulación de los contenidos en la red; por el otro se encuentran las crecientes relaciones jurídicas que nacen en las conexiones digitales.
Hasta ahora, en el primer rubro la autorregulación y las acciones de ONGs han dado por tratar de crear un ambiente adecuado en el uso de Internet, específicamente en aspectos técnicos, visuales y comerciales. Hay que considerar que la red no sólo sirve de medio de información, como el centro de documentación más grande y completo del mundo, con acceso geográfico libre y sin jurisdicción, sino también como medio de comunicación, con los más variados formatos de expresión. Los fines nocivos y la comisión de delitos informáticos - en aras de proteger la libertad de difusión e información en Internet - hicieron pensar sobre su influencia en la dignidad humana, en la protección a la niñez de contenidos inadecuados, en la reclamación de la propiedad intelectual de trabajos difundidos en la red, y en la promoción de actividades terroristas, burlándose la seguridad nacional. Desde que nació Internet tomó camino alejado de las disposiciones jurídicas, pues su carácter informal y la preferencia de códigos de comportamiento ético no hicieron necesaria mayor regulación. Sin embargo, la creciente presencia social, cultural y económica de la red en las relaciones humanas aumentó los conflictos e insertó la sensación en los gobiernos del requerimiento de reglas especiales para regular el disperso universo de mensajes y espacios en Internet.
Tarea compleja. La red fue diseñada para que la información fluyera con libertad. Esa fue su razón de ser. La interrogante por dilucidar es a quién se le asignan responsabilidades. ¿Son responsables los intermediarios de Internet, que facilitan la transmisión y el alojamiento temporal de la información? ¿O son los suministradores y autores del contenido y material que se pone a disposición de usuarios de una comunidad virtual sin un asiento o domicilio físico establecido? He ahí el dilema. Es que la disyuntiva se nutre de los componentes filosóficos y epistemológicos del tema. Porque Internet se inserta en el gran concepto de ciberespacio y le sirve de plataforma. Internet es un fragmento de una evolución histórica- tecnológica-sociológica, en donde el ciberespacio se coloca más allá de las redes, de las conexiones, y crea unos confines para un sistema social con diferentes tipos de interacciones. En el ciberespacio la realidad tiende a esfumarse. Cuerpo, lugar, frontera, tienen existencia simulada y producen imaginarios virtuales. Es más, en el ciberespacio la interconexión y la sincronización sustituyen las dimensiones de tiempo y lugar, que transmutan a la simultaneidad, distribución fragmentada y masivo paralelismo. Entonces, si el legislador no comprende esta realidad virtual, no puede tampoco encontrar las reglas para regularla.*Abogado

domingo, 14 de marzo de 2010

Fuera de mi jurisdicción

Isaac Villamizar
En el final de la película “De Ladrón a Policía”, el actor Martin Lawrence, que hace el papel de Miles Logan, un robador de joyas, al ser descubierta su verdadera identidad, se encuentra en plena frontera entre Estados Unidos y México. La línea divisoria hace que sus compañeros policías le indiquen que no pueden detenerlo porque está fuera de jurisdicción. Y con ello, los agentes no se atreven a dar ni un paso para aprehender al rufián. Esto me hace recordar cómo la jurisdicción de los venezolanos nos ha sido violada a placer por la autoridad.
En el sentido de demarcación, la jurisdicción es el poder o la autoridad que se tiene para gobernar y, más concretamente, el territorio al que se extiende. Con esa acepción, podemos asegurar, tajantemente, que nuestra jurisdicción individual ha sido penetrada como le provoca al gobierno. Una Constitución que fue promulgada para garantizar los derechos privativos de los ciudadanos, es omitida en su respeto y más bien vulnerada de manera indómita. El Presidente de la República, quien está obligado por el artículo 232 constitucional a procurar la garantía de los derechos y libertades de los venezolanos, es el primero que invade nuestra jurisdicción. Nuestro espacio de armonía, de tranquilidad y de dominio personal y familiar, lo irrumpe con sus acciones, causándonos un gran desasosiego permanente. Lo primero es tratar de imponernos una ideología comunista añosa y periclitada, que no está en consonancia con el auténtico sentir y requerimiento de la nación. Luego, quiere encadenarnos a sus fofas peroratas, intentando meternos su vocinglería e imagen a nuestras pantallas y receptores de radio, a como dé lugar, incluso, a costa de la eliminación de medios no sumisos. También quiere disponer a su antojo de nuestros bienes particulares, al demarcar con su vista y orden expropiatoria, cual Real Cédula, los bienes públicos, usurpándonos la esfera privada de nuestro patrimonio.
Si hablamos de la Asamblea Nacional, ésta ha sido la gradería para aplaudir tales desmanes, legislando inconstitucional e ilegalmente, para darle supuestos visos de legitimidad a tanto desafuero. Capítulo deplorable aparte en este exceso institucional merecen el Poder Judicial y el Ministerio Público, que han trastocado la exégesis, para convertirse en instrumento de ataque y persecución a la disidencia y para infligir lesión mortal, “en nombre de la República y por autoridad de la ley”, a los derechos constitucionales de libertad personal, respeto a la integridad física, psíquica y moral, inviolabilidad de las comunicaciones, debido proceso y derecho a la defensa, libre tránsito, libre expresión de pensamiento, comunicación plural, vida privada e intimidad, y manifestación pacífica.
En conclusión, este régimen ha cometido las tropelías más grandes en el traspaso de límites de nuestros derechos personalísimos. Pero llegará el momento – como siempre se ha dado en la oportunidad histórica mundial - de rescatar el fuero personal, la quietud para nuestra morada y dominio de los pensamientos, derechos e intereses propios y familiares. Será cuando le podamos asegurar al imperio del abuso: “Estas fuera de mi jurisdicción”.

¿Un nuevo Génesis?

Isaac Villamizar
Quizá sea la pregunta más intrigante que se haya hecho el ser humano en todas las épocas. Quizá sea el mayor misterio aún no develado definitivamente. En todo caso, la interrogante siempre aparece desde la perspectiva que se vive en el momento de plantearla. Tal vez por eso hayan surgido tantas teorías y posiciones filosóficas y cosmológicas para responder a esta incógnita: ¿Cómo se originó el Universo? O para hacerla de otra forma: ¿De dónde viene el mundo?
¿Qué había antes del principio? ¿Una nada vacía y silenciosa? ¿Una confusión de tinieblas que cubrían el haz del abismo? ¿Una extensión sin límites aproximada a la idea del infinito? La antigua versión bíblica del Génesis comenzaba en el versículo quinto del capítulo segundo. Allí no se sabe cómo fueron creados el cielo y la tierra. Dios es un alfarero que moldea la arcilla para crear al hombre y lo sitúa en un jardín. ¿Pero de dónde vino el polvo? Queda la angustia y la imprecisión. En el primer capítulo del Génesis –algunos lo atribuyen posterior al segundo – Dios, levantado sobre un mundo oscuro, confuso, de tinieblas, crea el cielo, la tierra y la luz. La creación es una preciosa arquitectura de orden, de sentido, de propósito y de gloria. La luz, el espacio y el tiempo en siete días, fueron los grandes pilares del mundo. Esta sería, en el siglo XV aC, la visión mosaica del principio.
En la Física Cuántica el vacío era una neblina muy sutil, donde tiempo y espacio se confundían el uno con el otro, en una especie de espuma diminuta, atomizada, inquieta, que se rasga y se rehace incesantemente. En realidad, el vacío cuántico es una fluctuación, una agitación y novedad permanente, que se manifiesta como producción y aniquilación de partículas y antipartículas, una continua variación, agitada bruscamente, apareciendo y desapareciendo, agrietándose y rehaciéndose. De esos cambios del vacío se pasó a espacio y tiempo, a luz y materia, a una realidad regida, a una extensión vastísima de universo. Es más, en la teoría de la cosmología inflacionaria – el universo en expansión exponencial – el vacío pasa a ser un bullir incesante de creaciones y aniquilaciones, una cuna tempestuosa de universos. Esta es una de las visiones del siglo XX sobre los orígenes.
Pero en pleno tercer milenio, ¿qué pensamos de la fundación del cosmos? Nuestra realidad es otra, muy diferente. Vivimos en un entorno de recientes descubrimientos de antinúcleos atómicos masivos de antimateria, que modifican la tabla periódica 3D y la comprensión de los agujeros negros; de dispositivos de micro-oídos que permiten conocer los sonidos del mundo microscópico, para escuchar las células, partículas o bacterias cuando se mueven; de neurotransmisores, neurociencias y neuroingenieros que han logrado detener la actividad neuronal con estímulos lumínicos; de física de partículas o física de altas energías, donde otros universos del multiverso presentan interacciones y condiciones de vida muy diferentes a las de nuestro propio universo; de liberaciones de energías tectónicas que achican la duración del día y desplazan el eje terrestre. Entonces surge una interrogante temible. ¿Estaremos manipulando el vacío cuántico y produciendo la destrucción de nuestro actual universo? ¿Será que en el futuro otras especies biológicas de cerebro más poderoso y mente más refinada estarán escribiendo un nuevo Génesis?

Esclavitud por ideología

Isaac Villamizar
Ciertas tribus africanas raptan algunos vecinos, los hacen esclavos y los drogan para abusar sexualmente de ellos. El deterioro físico de los sometidos es tal que acaban falleciendo. En cualquiera modalidad de esclavitud hay dominio sobre el otro, perdiéndose la capacidad de disponer libremente de sí mismo.
La Declaración Universal de los Derechos Humanos, desde 1948, postula que nadie estará sometido a esclavitud ni a servidumbre; la esclavitud y la trata de esclavos están prohibidas en todas sus formas. Sin embargo, en algunas zonas marginales del mundo islámico se mantiene la esclavitud bajo diversas formas de servidumbre. Estudios sobre la nueva esclavitud en el mundo global aseguran que existen más de 27 millones de esclavos en el orbe. Uno de los países que mantiene la esclavitud y la protege en la práctica es Mauritania, al noroeste de Africa, a pesar que en septiembre de 2007 se promulgó una ley que la criminaliza. En zonas donde no hay administración gubernamental o no se llega fácilmente, como en la Selva Amazónica aún existe la esclavitud. En Sudán los esclavos, principalmente mujeres y niños de la tribu Dinka, en operaciones de compraventa que se realizan en modernos mercados, tienen un costo entre 15 y 90 dólares. Se les obliga a cambiar de religión y a convertirse al Islam. Les cambian sus nombres por otros árabes y son forzados a hablar una lengua que no conocen.
Históricamente la esclavitud responde al fortalecimiento y sostenimiento de la actividad económica, al emplearse a los esclavos como mano de obra. Investigaciones sostienen que hay una relación recíproca entre esclavitud y capitalismo, y que mientras varía el dinamismo de éste, el carácter represivo de la actividad laboral también varía. Agregan que capitalismo y democracia parten de creencias diferentes sobre la adecuada distribución del poder, pues la una cree que es deber de los económicamente fuertes expulsar a los no aptos del negocio y eliminarlos, mientras que la otra se basa en la distribución equitativa del poder político. Pareciera que la escasez de controles, la falta de educación, el desinterés a nivel individual y social, la falta de leyes - o de su aplicación – que garanticen la igualdad y protección jurídica de las personas, la complicidad encubierta, el cierre de canales de información y denuncia, los conflictos raciales y de género, propician la explotación de personas bajo esclavitud y servidumbre.
Pero resulta que la esclavitud suele reaparecer en la misma proporción en que avanzan las formas autoritarias de gobierno. Y es cuando ocurre no sólo la servidumbre por deudas, sino también la participación obligatoria de ciudadanos en trabajos públicos en el contexto de una ideología, tal como sucede en algunos países asiáticos, como Vietnam, y en otros países africanos, como República Centroafricana, Sierra Leona y Tanzania. En estos casos, el Estado somete al empleado con salarios míseros, deuda, falta de pago, extensas jornadas laborales, posturas corporales perjudiciales en la actividad, grandes esfuerzos físicos o mentales, manipulación de productos tóxicos, ambientes insalubres, tratos inhumanos, ausencias de descansos, trabas y prohibición del abandono del empleo.El Gobierno de Venezuela ha sido demandado por esclavitud moderna. Es la muestra del tráfico de la miseria humana y de la condición denigrante del ser con las que el comunismo y socialismo del siglo XXI practican hoy el vasallaje.

domingo, 21 de febrero de 2010

SOÑAR NO ES UN DELITO

Isaac Villamizar
Hypnos fue la personificación griega del sueño. Vivía en una cueva oscura, donde el sol nunca brillaba. A su entrada crecían amapolas y otras plantas hipnóticas. Se le representaba dormido en una cama de plumas con cortinas negras a su alrededor. Uno de sus hijos oníricos fue Morfeo, quien se encargaba de inducir los sueños de quienes dormían y de adoptar una forma humana para aparecer en ellos. Morfeo permitía a los mortales huir por un momento de las maquinaciones de los dioses.
Desde la antigüedad se sueña. Nuestro reciente pasado ha sido convulsionado con pesadillas. Venezuela está en trasnocho. Necesitamos reelaborar las informaciones almacenadas en nuestra memoria, para sumergirnos en una realidad virtual, que pudiera ser más real en años venideros. La energía del sueño debe colocarnos en un escenario envidiable. Es el que queremos los venezolanos que añoramos esta patria.
Tenemos derecho a soñar con otra Venezuela, muy distinta a la de hoy. En nuestro sueño vemos que la renta petrolera ha girado 180 grados. Hay una inversión en el sector productivo que aprovechan todas las industrias manufactureras. Hay pleno empleo, con sueldos que, en realidad, son los mayores nominales y reales del continente. En cada zona industrial y residencial hay cadenas de mercados abarrotados de todos los productos, y en cada uno de ellos, no menos de 20 marcas para escoger. Un tercio de estos ingresos petroleros se invierte, por disposición constitucional, en el campo. Los llanos centrales y orientales, en cada hectárea, producen arroz, maíz y sorgo, lo que nos ha convertido en el mayor exportador de estos rubros en Suramérica. Colombia y Argentina importan el ganado vacuno que pasta, con toda la asistencia técnica agropecuaria, en el Sur del Lago. ¡Por fin se ha sembrado el petróleo!
En nuestra visión onírica, otro tercio del oro negro, por Carta Magna, se ha destinado a la educación. Destacados jóvenes científicos egresan de todas las universidades públicas y privadas, donde se concentra lo más granado del conocimiento latinoamericano. Venezuela ingresa a los top ten y poderío de la innovación digital e informática del mundo. Hay diversos centros de investigaciones científicas y médicas, en donde se encuentra la cura definitiva del cáncer y del sida. Todos los años hay un venezolano nominado al Premio Nobel, por tan calificados adelantos. En nuestro sueño aparece que el país se metió de lleno en la producción de energías alternativas, eólica, hidráulica, solar y termoeléctrica. La demanda interna está totalmente cubierta y los países del Alba y del Caribe nos la compran, generándose importantes ingresos a las arcas nacionales. Los principales centros urbanos son ecociudades; son verdes, en armonía total con el ambiente. Canaima se ha convertido en la principal ecociudad de Suramérica, con todas las comodidades, a donde llegan turistas de los cinco continentes. Todas las costas venezolanas cuentan con los más modernos complejos turísticos y hoteleros del mundo, con excelentes vías de comunicación, infraestructura y servicios, siendo escuela obligada de españoles y caribeños.
Se nos aparece Venezuela entre los primeros cinco países del mundo con los mayores índices de PIB, de desarrollo humano y de calidad de vida. El trípode indisoluble Estado-Empresa-Sociedad es la mayor fortaleza que tenemos.Soñar no es un delito. Si todos nos conectamos en este sueño, algún día lo estaremos contando.



UN NUEVO VENEZOLANO

Isaac Villamizar
Los recientes estudios de opinión de las encuestadoras más serias del país revelan algo maravilloso. Podríamos decir que sería el milagro por todos esperado. En los venezolanos hay todavía una suficiente reserva de principios, como a la vez un llamado urgente a un viraje. El venezolano, en este momento, está más interesado en el concepto de un nuevo país que en los liderazgos. Para el venezolano sus valores y sus necesidades están en un plano que debe ser acertadamente caracterizado e interpretado por sus dirigentes. Este reclamo debe ser atendido con prioridad.
Los estudios indican que la influencia del liderazgo presidencial se ha debilitado significativamente. Ello se debe a que el discurso del Presidente no sintoniza con el marco de valores y demandas de la mayoría del país. El primer mandatario – según los análisis – se ha debilitado en su capacidad de renovar esperanza. ¿Por qué? Porque el Presidente no convence con su propuesta ideológica y su pensamiento revolucionario. Su visión de la sociedad no es popular y está agotada. Lo popular - que aún mantiene - es su discurso humano y de objetivo social.
Señalan los expertos que el malestar social crece. El colectivo se haya con un gran desencanto y frustración, debido al agravamiento de los problemas sustanciales y a la falta de soluciones concretas e inmediatas.
Por otra parte, el país está atomizado, desarticulado, sin un horizonte, sin una visión conjunta, sin prospectiva. Pero lo más inquietante es que, alternativamente, el país se haya sin propuestas que surjan de liderazgos confiables e inspiradores.
Los sondeos ratifican que la oposición debe renovarse y reaprender. Pero este trabajo no debe aplazarse, porque la sociedad tiene hambre de una oferta que le encamine al reencuentro con la esperanza. El país reclama no un líder, sino un mensaje. Parece que en el fondo estamos conscientes que hay demasiados líderes. Algunos, incluso, estarían en la escuela de su formación, como el caso de las nuevas generaciones, del movimiento estudiantil. Los jóvenes son diamante en bruto, con ideas modernas y esperanzadoras. Pero lo que clama a gritos Venezuela es un nuevo concepto de sí. Estamos urgidos de una promesa renovadora, no partidista, ni oficialista ni oposicionista, con sabor venezolano, de lo nuestro, de lo que se siente el venezolano en estos tiempos. Esa fresca y acabada razón de ser debe ser inclusiva, con todos los pareceres, de carácter superior.
Todo lo anterior muestra que necesitamos construir una nueva identidad nacional, donde todos nos sintamos representados. Este naciente sentimiento debe estar adaptado al mundo de hoy, dinámico, progresista, ecológico, globalizado. Yo no entendía el por qué los venezolanos hemos estado en una catalepsia, en una hipnosis colectiva, en un letargo, en el laissez faire. Tampoco comprendía - en todas sus dimensiones - la terrible mordaza del miedo colectivo. Pero cuando reflexiono sobre este grito que nos estamos haciendo, advierto que estos fenómenos son reactivos, y que en el inconsciente colectivo vibra un reencuentro con nosotros mismos. No estamos conformes con la forma como nos manifestamos o con aquella que quieren hacernos ver y sentir, deformante y envilecedora. No. Estamos clamando por un despertar ontológico y ontogénico, en donde desaparezca cualquier sentimiento de odio y confrontación improductiva, de angustia colectiva permanente. En el fondo, esta catalepsia y temor nos han obnubilado y no dejan vernos en el espejo, para enfrentar nuestra cruda realidad y para asumir, decididamente, esta cirugía reconstructiva.El venezolano está en búsqueda de un rostro inédito, de un nuevo sentimiento, de un nuevo corazón, de un nuevo pensar. Es otro retrato que quiere diseñar. Es una noción originaria de genotipo y fenotipo criollo. Ya sabemos, por los datos, que estamos en etapa fecundable, tal vez embrionaria. Pero allí, definitivamente, estaría el milagro y la esperanza.

EXPROPIACION DEL ALMA

Isaac Villamizar
La Asamblea Nacional acaba de sancionar la Reforma Parcial de la Ley para la Defensa de las Personas en el Acceso de los Bienes y Servicios, conocida comúnmente como Indepabis. Aduce en la exposición de motivos que esta ley amplía la acción del Estado sobre todo tipo de bienes y servicios relacionados con las actividades de producción, fabricación, importación, acopio, transporte, distribución y comercialización, dándole competencia para dictar las medidas necesarias – excepcionales - a fin de evitar el alza indebida de precios, el acaparamiento y el boicot de productos declarados de primera necesidad.
En realidad el propósito de esta reforma es incorporar un nuevo artículo, el 6, según el cual el Ejecutivo Nacional puede iniciar procedimiento expropiatorio de estos bienes, sin que medie para ello declaratoria previa de utilidad pública e interés social por parte de la Asamblea Nacional. En todo caso, el Ejecutivo Nacional puede ocupar estos bienes, darles operatividad temporal e incautarlos, mientras dure el procedimiento expropiatorio, lo cual se materializa mediante la posesión inmediata, administración y aprovechamiento tanto del local e instalaciones, como de los bienes, transporte y distribución.
La expropiación es la privación de la propiedad cuando media una declaratoria de utilidad pública o interés preferente, y a cambio de una indemnización justa. En los casos de expropiación, la doctrina y jurisprudencia dan cuenta que se exige 1.- declaratoria de utilidad pública del bien. 2.- declaratoria que su ejecución exige el traspaso de todo o parte del bien a expropiar. 3.- justiprecio de lo que se haya de ceder. 4.- pago del precio que representa la indemnización. Todo esto configura un sistema de garantías, para hacer compatible la expropiación con la garantía básica de la propiedad. Así lo dispone el artículo 115 de la Carta Magna, cuando precisa que sólo por causa de utilidad pública e interés social, puede ser declarada la expropiación de cualquier clase de bienes. Así también lo exigen los artículos 7, numeral 1, y 13 de la Ley de Expropiación por Causa de Utilidad Pública y Social, salvo muy contadas excepciones. Esta declaratoria previa de utilidad pública, repito, es una garantía al propietario de que no sea atropellado en su derecho individual. Desconocer en la reforma de la Ley del Indepabis esta garantía al ciudadano de obtener una previa declaratoria de la causa legitimadora en el procedimiento expropiatorio, y el incremento de la potestad del Estado en el desapoderamiento del objeto expropiado, de manera tan discrecional, es una muestra más de cómo el Estado venezolano actúa en franca rebeldía constitucional y legal. Precisamente, fue en la Revolución Francesa cuando se consagró el delito de expropiación ilegal, al afirmarse que, como reacción contra la arbitrariedad característica del régimen que derrocó, se apresuraba a incorporar en la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano de 1789, como uno de los cuatro grandes derechos naturales e imprescriptibles del ciudadano, el de la propiedad, considerado como derecho inviolable y sagrado, del que nadie puede ser privado sino por causas legalmente acreditadas, de evidente utilidad pública. Tal vez expropien arbitrariamente todos los bienes. Tal vez expropien arbitrariamente lo corpóreo, lo tangible, lo que al régimen le de dividendos ante el público de su potestad de dominador y dueño absoluto. Más no podrán expropiar el alma y la esencia, porque al decir del propio Ernesto Che Guevara, “la revolución es algo que se lleva en el alma, no en la boca para vivir de ella.”











EL DERECHO DE ULPIANO

*Isaac Villamizar
Ulpiano fue un jurista romano, prefecto del pretorio del emperador Alejandro Severo, que se dedicó a lograr la más completa y minuciosa recopilación del derecho vigente en su época. Cuando estudiamos Derecho Romano en la universidad, aprendimos que de sus obras se conservan algunos pasajes en el Digesto, obra jurídica publicada en el año 533 dC por el Emperador Bizantino Justiniano I, que contiene una recopilación de la jurisprudencia romana que servía en forma de citas a los juristas de la época. Efectivamente, fue incluido junto a Gayo, Paulo, Modestino y Papiniano, en la ley de citas de 426, que regulaba la referencia de las obras de los juristas ante los tribunales, es decir, qué juristas podían ser invocados y los criterios para la decisión del juez ante opiniones diversas de éstos. La actividad expositiva del Derecho de Ulpiano le valió el mayor premio para un jurista romano: ser el más utilizado en la compilación de Justiniano, convirtiéndolo en uno de los principales informantes del Derecho Romano.
Es célebre conseguirse en los estudios jurídicos de la universidad con los tres preceptos o principios del Derecho, expuestos por Ulpiano: 1.- Vivir honestamente. 2.- No dañar a otro. 3.- Dar a cada uno lo suyo. Al interpretar estas reglas se concluye que las leyes sirven para garantizar y guardar las buenas costumbres; que las leyes piden que se viva honestamente, con dignidad; que las leyes prohíben perjudicar a otro en su persona o en sus bienes, lo que equivale a no dañarlo; y que las leyes prescriben dar a cada quien lo que le corresponde.
El Presidente de la República, durante el Acto de Grado de la Primera Promoción de Abogados de la Universidad Bolivariana de Venezuela, señaló que existen dos Derechos: El Derecho Burgués y el Derecho Socialista. Además, les ofreció a los graduandos conformar los Consejos de Justicia Socialista, becándolos para que tomen el postgrado que les ofrece la Escuela de la Magistratura y el Ministerio Público, y así puedan optar al cargo de Magistrados. Es evidente que al Presidente se le olvidó un tercer Derecho: el Derecho de Ulpiano y sus tres preceptos. Porque en esta Revolución Socialista su Derecho ha servido para establecer la mayor corrupción en el sistema de justicia venezolano. El Derecho Socialista ha sido cómplice de la impunidad más grande en las atrocidades que ha cometido la función pública en once años. El Derecho Socialista y su foro judicial han servido para tomar el instrumento de la justicia a fin de perseguir políticamente a la disidencia y para ser connivente en la violación reiterada de los derechos humanos y derechos procesales de quienes estorban a la pseudo revolución. El Derecho Socialista ha sido el medio más notorio para el abuso, para la confiscación, para la arbitrariedad y para asegurarle a una élite de boliburgueses las prebendas más groseras provenientes del dinero público de todos los venezolanos.El Derecho de Ulpiano está muy lejos del Derecho Socialista. Ese fue el que nos enseñaron ilustres catedráticos y juristas en la universidad y el que ejercemos desde hace 24 años. A los Abogados de la Primera Promoción de la UBV se los voy a decir en latín: “Iuris praecepta summa haec: honeste vivere, alterum non laedere, suum cuique tribuere.” *Abogado

ESTADO SIN DERECHO

Isaac Villamizar
El 23 de Junio se ha celebrado el Día Nacional del Abogado. El ejercicio de la abogacía impone dedicación al estudio de las disciplinas que impliquen la defensa del derecho, de la libertad y la justicia. Así lo prescribe La Ley que regula nuestra actividad, en su artículo 2. El abogado tendrá como norte de sus actos asegurar el ministerio del Derecho. Es deber esencial del abogado defender los derechos de la sociedad, cooperando en la conservación y perfeccionamiento del orden jurídico. El abogado puede publicar comentarios con fines científicos en diarios. Así también lo dictaminan los artículos 2, 4 y 9 del Código de Etica Profesional del Abogado venezolano.
Reflexionemos, entonces, en esta celebración, sobre la ausencia de Derecho en el Estado venezolano. La Carta Democrática Interamericana, adoptada por la OEA en el 2001, definió como componentes fundamentales del ejercicio de la democracia, la transparencia de las actividades gubernamentales, la probidad, la responsabilidad de los gobiernos en la gestión pública, y el respeto por los derechos sociales y la libertad de expresión y de prensa. Asimismo, son fundamentales para la democracia la subordinación constitucional de todas las instituciones del Estado a la autoridad civil legalmente constituida y el respeto al estado de derecho de todas las entidades y sectores de la sociedad. De todos esos componentes la separación e independencia de los Poderes Públicos, es uno de los pilares fundamentales del Estado de Derecho. En América Latina, en los períodos democráticos de nuestros países, siempre ha habido instituciones que buscan asegurar el respeto a los derechos humanos, la sujeción del poder al derecho, elecciones más o menos regulares y libres, y un régimen plural de partidos.
Sin embargo, nuestras democracias no terminan de madurar y el Estado de Derecho no culmina por apoderarse de nuestras instituciones políticas. Nos ha faltado el más clásico de los elementos integrantes de la democracia, la separación e independencia de los poderes, lo que permite un efectivo control hacia el poder, y la posibilidad real de participación política del ciudadano, un gobierno diáfano y la vigencia inmune del imperio de la ley. Sólo controlando al Poder en Venezuela es que puede haber elecciones completamente libres y verdadera representatividad; sólo controlando al Poder en Venezuela es que puede haber pluralismo político; sólo controlando al Poder en Venezuela es que puede haber participación democrática; sólo controlando al Poder en Venezuela es que puede asegurarse una seria honestidad en el ejercicio del gobierno, con exigencia de rendición de cuentas por parte de los gobernantes; sólo controlando al Poder en Venezuela es que se puede garantizar un gobierno sometido a la Constitución y a las leyes; sólo controlando al Poder en Venezuela es que puede haber un legítimo acceso a la justicia, y un poder judicial con autonomía e independencia; sólo controlando al Poder en Venezuela es que puede haber un fiel respeto a los derechos humanos. Sólo controlando al Poder en Venezuela es que puede haber genuino Estado de Derecho.La democracia es mucho más que las solas votaciones. El Gobierno - así tenga origen electoral y crea tener apoyo popular - con concentración y centralización, sin control efectivo, es un gobierno autoritario y conduce, más temprano que tarde, a la tiranía.

sábado, 16 de enero de 2010

LA INFORTUNADA HAITÍ

Isaac Villamizar
Cuando Colón llegó a la parte occidental de La Española se encontró con los indios lucayos, taínos y algunos caribes. Al final del siglo XVI casi toda la población nativa de indios arawacos había desaparecido, tras ser esclavizada o asesinada por los conquistadores. Haití, colonizada inicialmente por los españoles, pasó paulatinamente a Francia y fue, en el siglo XVIII, la más próspera de sus colonias, gracias a los cultivos de caña de azúcar, añil y café. La rebelión de los esclavos negros arruinó su floreciente economía. Francia le reconoció su independencia en 1825. Los Estados Unidos intervinieron y ocuparon el país de 1915 a 1934. Sus inversiones iniciaron una modernización que apenas benefició a campesinos. Tras prolongadas luchas, en 1957, Francois Duvalier, “Papá Doc”, fue elegido Presidente e impuso una dominación absoluta con el apoyo de los negros – contra la élite mulata – y de la milicia de los “tontons macoutes”. Se proclamó Presidente vitalicio desde 1964. Con Papá Doc el Ejército, la Iglesia y la burocracia, relacionados con Estados Unidos, se ejerció el control durante 30 años. A su muerte, en 1971, le sucedió su hijo Jean Claude, “Baby Doc”, con tan sólo 19 años. Igual que su padre, se autoproclamó mandatario vitalicio y continuó la política represiva. La extrema pobreza y los altos índices de Sida, detectados en la década de los 80, produjeron el descontento generalizado de la población que exigía cambios radicales. Baby Doc tuvo que exiliarse en 1986. La inestabilidad política, social y económica se apoderó de la empobrecida nación. Se inició a continuación una confusa etapa de elecciones presidenciales, seguidas de cuartelazos, que culminó en el triunfo para Presidente del sacerdote salesiano Jean Bertrand Aristide, en 1990, y su destitución mediante golpe militar, en 1991. La situación empeoró porque la OEA y la ONU impusieron fuertes sanciones al gobierno de facto. Más de 30 mil haitianos huyeron del país. Las sanciones agudizaron la pobreza y acabó con la precaria economía de la nación caribeña.
Haití vivió meses aciagos a partir de 1994. Tropas estadounidenses desembarcaron y prácticamente se hicieron cargo del país, para mediar luego en el regreso al poder de Aristide. Éste gobierna a través de pandillas callejeras fieles a él y no a la frágil democracia de Haití. René Preval gana las elecciones en 1995. Cinco años más tarde Aristide accede de nuevo a la presidencia. En el 2001 el descontento volvió a amenazar la endeble estabilidad de Haití. En enero de 2003 el gobierno de Aristide coincidió con una serie de manifestaciones y huelgas que paralizaron al país, en demanda de la revocación de una medida de incremento entre el 50 y el 80 por ciento las tarifas de los combustibles, retomó la violencia y diversas protestas se realizaron con frecuencia. De esta manera, “Les Chiméres” (quimeras), grupos armados pro-Aristide, comenzaron enfrentamientos. Hacia diciembre del mismo año, bandas leales a Aristide atacaron a estudiantes universitarios y, en febrero de 2004, algunas de las pandillas a las que él había suministrado armas se volvieron en su contra y gradualmente tomaron el país en una marcha hacia Port-au-Prince. Hubo un intento de golpe y el 29 de Febrero de 2004 abandonó su país en medio de una rebelión armada. El 7 de febrero de 2006 es elegido René Preval como nuevo Presidente, quien se desempeña hasta la actualidad.
El relieve de Haití, muy accidentado, presenta una alternancia de montañas y de fosas de desfondamiento alineadas de oeste a este. De allí la denominación de Haití, nombre indígena que en español significa “tierra montañosa”. Hay varios lagos en el país. Abundan los ríos, aunque muchos son cortos y de corriente rápida. Sin embargo, la vegetación y los suelos están muy degradados por la sobrecarga humana. El subsuelo produce bauxita, que exporta en forma no transformada. La nación afronta el grave problema de la deforestación. En 1923, los bosques cubrían el 60 por ciento de la superficie; hoy tan sólo ocupan el 2 por ciento.
Actualmente su población supera los 9 millones de habitantes, cuya composición étnica es de 95 % de raza negra y 5 % de mulatos y caucásicos. El crecimiento natural produce una superpoblación absoluta y la hipertrofia de la capital, única ciudad grande del país. La tasa de fecundidad, es decir, el número de hijos por mujer es de 4,9. La mortalidad infantil es de 63 por 1000 nacimientos y la esperanza de vida es de 55 años los hombres y 58 la mujer, muy inferior a la media antillana.
El nivel de vida de Haití es uno de los más bajos del continente americano. Su Producto Interno Bruto per cápita es el más bajo del hemisferio occidental, por lo que se considera el país más pobre de América. Haití está en el lugar 150 de 177 países en el índice de Desarrollo Humano de la ONU. Aproximadamente un 70 % de la población vive en la pobreza. Cerca del 70 % de los haitianos depende de una agricultura de subsistencia a pequeña escala. Los ingresos de la población - menos de dos dólares diarios por persona - no les alcanza para adquirir los alimentos básicos, debiendo, para subsistir, alimentarse con una especie de galletas hechas de barro, manteca vegetal y sal, que es vendida a bajo precio, lo que acarrea secuelas de desnutrición y otras enfermedades.
Los recientes análisis estiman que el proceso que lidera la Misión de Estabilización de las Naciones Unidas en Haití (MINUSTAH) para recuperar el país, tendrá un retroceso de 20 años, por el terremoto de 7.0 grados Ritcher que arrasó la isla.

VERTEDERO DE BASURA

EN CABO HAITIANO